Un estudio de Gaxu, una empresa que se enfoca en el registro de accesos y asistencia, ha revelado que los habitantes de Santiago, Chile, suelen retrasarse en promedio 16,5 minutos semanales en sus compromisos, lo que pone de manifiesto un problema generalizado de puntualidad y compromiso. Estas demoras afectan tanto al ámbito laboral como a las relaciones personales. Las rutinas y la falta de organización son factores que influyen en la cancelación de planes, junto con otras razones como enfermedades o prioridades cambiantes.
Para abordar este problema, Stella Artois lanzó una campaña llamada «Dinners that Expire«, en la que instaló códigos QR en las calles de Santiago. Al escanear estos códigos, las personas pueden participar en un concurso para ganar cenas en restaurantes populares de la ciudad, como Caoba Bar, Malva Loca, Jardín Secreto, Castillo Forestal, Córdova Bar y Ambrosia Bistró. Sin embargo, para garantizar que se eviten los retrasos, las invitaciones caducan el mismo día si la persona o alguno de sus acompañantes llega tarde.
La campaña tiene como objetivo fomentar las conexiones personales y reavivar la tradición de compartir comidas con amigos y seres queridos. Los códigos QR están disponibles entre las 18:00 y las 21:00 horas, y los ganadores deben llegar a tiempo para disfrutar de su cena. La campaña estará vigente hasta el 29 de octubre y busca poner fin al hábito de cancelar planes y aprovechar momentos irreemplazables.